Gracias a todos aquellos que nos permiten seguir soñando despiertos. Que son muchos, y la mayoría de las veces anónimos. Pero a veces, les hacemos pasar un poco de vergüenza porque se lo merecen. Al fin y al cabo, son nuestros héroes.

¿Sabíais que en el Centro Vértice tenemos nuestro propio cine de verano? Sí, sí. Estáis leyendo bien. La pandemia nos ha hecho buscar alternativas de ocio para nuestros chicos y una de ellas fue sacar nuestras queridas sesiones de cine a la calle durante los meses en los que hace buen tiempo.

Todo empezó con una pregunta, la de Eduardo Quilez, a su mujer, Laura; que trabaja con nosotros en la residencia. Eduardo es encargado en la empresa de montajes industriales Metaliber. Cuando ella le dijo que habíamos comprado un proyector por Internet, el cuál colgabamos de árboles, escarpias y ventanas, él dijo: «¿Quieres que os haga yo un soporte?»

¡Y qué pedazo de soporte! Gracias a Metaliber, que donó los materiales y las herramientas; y a las prodigiosas manos de Eduardo; tenemos un súper cine de verano que además es portátil y plegable. ¡Un lujazo! Muy pronto retomaremos nuestros viernes de cine y palomitas. Una actividad que, como explica Rosana Tapia, coordinadora de nuestra residencia, los usuarios adoran: «Seguimos adaptándonos a la realidad que ha traído consigo la pandemia. Lo importante es que sigan sonriendo y pasando buenos ratos». Gracias, Metaliber. Gracias, Eduardo.